Hace 58 años la fundación del Colegio Católico Amigoniano Juan XXIII  fue un hecho providencial para toda la ciudad de Buenaventura. En esta parte del país hacía falta una institución que desde la mirada laical y las huellas del padre Luis Amigó recogiera las aspiraciones de sus habitantes.

Desde sus inicios el 26 de junio de 1962  los esposos Luis Ovidio Quezada y Rosario Ramírez de Quezada le han puesto su toque muy particular desde la óptica Amigoniana a una obra que es reconocida en la ciudad por su calidad académica, cultural y sus valores humanos, forjadora de seres humanos íntegros y solidarios. 

Hoy agradecemos a todos nuestros docentes, a la Diócesis, a la comunidad en general y muy especialmente a cada uno de nuestros alumnos que se han sumado a esta noble causa haciendo que el colegio no sea una obra más, sino que pasara a ser una realidad llena de orgullo para toda la ciudad, fruto de la inteligencia y disciplina de todos.

Ahora su rectora Rosario Ramírez de Quezada ve con mayor claridad los retos que plantea el futuro para la institución, estamos seguros que nuestra historia seguirá contrayéndose con el apoyo de todos y que cada día vendrá cargada de retos y tareas ambiciosas, pero esa es la esencia de la utopía, en el sentido de que lo que se pretende alcanzar con el esfuerzo humano está más allá de los resultados. Eso es lo interesante de cada día: siempre está la opción de seguir luchando y poder logar lo propuesto. Infinitas gracias a toda la comunidad educativa.