– «La vocación Amigoniana no es una experiencia que se viva en ciertos momentos, o en tal o cual lugar, sino algo que uno interioriza y vive continuamente, no importa dónde se esté, un verdadero y propio estilo de vida» (Testimonio laical, África)

– «Desde que conocí al Padre Luis Amigó, he crecido constantemente, conociéndome mejor a mí misma y haciéndome capaz de sentir en comunidad con los Amigonianos. Lo mejor que me ha sucedido, desde que conocí a los hermanos, es haber alcanzado a ver que lo que Dios quiere para mí es lo que también quiere de ellos. Él me ha dado un lugar al que pertenecer» (Testimonio laical, Alemania)