Profesión perpetua
La profesión perpetua es un acto de trascendencia decisiva para la Vida Religiosa, porque reafirma definitivamente su consagración a Dios para siempre. Esta consagración perpetua estuvo precedida de un tiempo de preparación que acrecienta aún más el deseo de vivir para Dios a través del servicio a los hermanos.
La profesión perpetua de Fr. Rafael Antonio García Tovar, Terciario Capuchino que tuvo lugar el pasado lunes 29 de junio en el Seminario Fray Luis Amigó en la ciudad de Bogotá expresa la entrega total de su vida al servicio de Dios, en lo cual está la perfección del hombre, y cosiste principalmente en el cumplimiento de los tres votos castidad, pobreza y obediencia, impulsados por la caridad.

De ahora en adelante será consagrado, con-sagrado, destinado al culto divino y propiedad de Dios, no del mundo, lo afirma contundentemente Nuestro Señor: “Si fuerais del mundo, el mundo os amaría como cosa suya, pero como no sois del mundo, sino que yo os he escogido sacándoos del mundo, por eso el mundo os odia” (Jn 15,19).
La Familia Amigoniana se alegra con Fr. Rafael que a través de la Congregación de Religiosos Terciarios Capuchinos ofrenda su vida a la Iglesia y a la comunidad.