Testimonio del P. Luis Amigó
Luis Amigó en la epidemia del cólera de 1885: Cuidarse y cuidar a los suyos.
Confiar en la providencia de Dios que siempre nos manifiesta su solicitud por nosotros y ser instrumento de su providencia para nuestros hermanos.

Tomar la iniciativa heroica de cuidar en primera fila a los coléricos a través del testimonio heroico de las primeras hermanas Terciarias Capuchinas.
Buscar respuesta a las necesidades más urgentes: Asilo para acoger a los huérfanos de la epidemia.
En alianza con la Familia Amigoniana y con personas de buena voluntad.
Oblación del P. Luis para que cesara la epidemia: ofrecimiento de la fundación de los hermanos Terciarios Capuchinos.
Les Congregaciones y la Familia Amigoniana perpetúan hasta hoy esta acción misericordiosa…
+ Fr. Bartolomé Buigues Oller, TC